bolsa de colombia

Si bien cuando hablamos de cualquier bolsa con peso en la economía internacional hablamos de mercados con siglos de historia, la narración cambia cuando hablamos de la Bolsa de Valores de Colombia (BVC), con sede en las tres ciudades más importantes del país (Bogotá, Cali y Medellín) y creada muy recientemente, en el año 2001.

Los orígenes de la actual BVC: las tres bolsas independientes

Sin embargo, que la BVC haya sido creada en el siglo XXI no quiere decir que no existiese ningún tipo de mercado bursátil colombiano en el pasado. Es más, lo cierto es que había tres: la Bolsa de Bogotá (creada en 1928), la Bolsa de Occidente (radicada en Cali y creada en 1983) y la Bolsa de Medellín (del año 1961).

Ya entrado el siglo actual, las principales bolsas colombianas decidieron unirse creando lo que hoy se conoce como el BVC, vigilada por la Superintendencia financiera colombiana, y que cuenta con sedes de diferente tamaño en unas 19 ciudades de toda Colombia.

La historia del mercado bursátil previo en Colombia

Antes de la gestación de la BVC existió un importante mercado accionarial en las principales ciudades del país cafetero, por mucho que no hubiese un mercado bursátil unificado. De hecho, tal y como ocurrió en la mayoría de los estados, la bolsa colombiana también encuentra su origen en las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del siglo XX.

Por aquel entonces, se unieron dos factores: la incipiente industrialización del país colombiano y el boom del café, que sería uno de los productos más importantes en un país que no se había independizado mucho antes del dominio imperial español.

Ambos factores se unieron para crear un mayor interes para invertir y especular entre las clases medias y altas de Colombia, cláusula imprescindible para la creación de un mercado bursátil. Los primeros 20 años vieron intentos fallidos de crear la primera plaza bursátil propiamente colombiana, algo que se acabó por conseguir ya casi llegando a los años 30.

El IGBC, el índice principal de la Bolsa de Valores de Colombia

Desde su creación en 2001, el BVC cuenta con un índice predominante que engloba a los valores más importantes de los parqués de las tres ciudades colombianas: el IGBC.

Importancia del IGBC para los traders e inversores

Como en el caso de cualquier otro índice bursátil, el IGBC colombiano ofrece todo un abanico de posibilidades a los traders e inversores de cualquier parte del mundo.

  • Primero de todo, ofrece un resumen diario y muy verídico sobre el estado general del mercado financiero colombiano, una especie de valoración acumulada de todas las empresas que sirve para conocer el estado general del sector
  • Para aquellos a los que les guste el trading fundamental, operar con CFDs sobre índices bursátiles es siempre una buena opción
  • Si también te interesa el mercado Forex, el IGBV te puede aportar ciertas pistas de en qué dirección se está moviendo el peso colombiano, ya que si, la bolsa baja, es posible que también caiga la valoración de la moneda

Las firmas más importantes del IGBC

  • Sector bancario Dentro del espacio económico de las instituciones financieras se encuentran algunos de los valores más importantes del IGBC. Uno de los más destacados es Bancolombia, una institución con presencia en numerosos países de todo el mundo, aunque también existen otros bancos de tremenda importancia como el Banco de Bogotá o el Banco de Occidente
  • Otros sectores En el IGBC podemos encontrar un gran número de valores de los más diversos tipos, como la cementera Cementos Argos, la petrolera Ecopetrol, el Grupo Aval, los Almacenes Éxito (muy exitosos por toda Latinoamérica) y las Acerías Paz del Río, de propiedad brasileña

MILA, el Mercado Integrado Latinoamericano

La BVC también se encuentra integrada dentro del mercado bursátil transnacional de la MILA, el Mercado Integrado Latinoamericano, que agrupa a las bolsas principales de los cuatro países firmantes de la Alianza del Pacífico: México, Chile, Perú y la propia Colombia.

Aunque por nivel de capitalización la bolsa colombiana se encuentra un poco por debajo de la chilena y, sobre todo, de la mexicana, el MILA nació con el objetivo de ofrecer a los inversores de los cuatro países la posibilidad de operar e invertir con total facilidad en cualquiera de los estados, abriendo así el abanico de posibilidades.